Eduardo Martínez es fundador y CEO de Go Madrid, y cofundador y director general de Olivo. Un ingeniero informático que echó los dientes laborales en la city londinense, y abandonó su cómodo puesto de consultoría en Accenture, para responder la vocación del emprendedor inconformista, en busca de la perfección para cambiar las cosas.
PREGUNTA: En diez años ha creado once empresas, ha vendido varias y dos de ellas fueron un pelotazo, solo ha tenido dos fracasos. ¿Cuál es la receta para tener una tasa tan alta de éxito?
RESPUESTA: Rodearse de un muy buen equipo. Montamos negocios de lo que conocemos, y estudiamos mucho cada proyecto para llegar al objetivo final. Pero somos muy flexibles para ir ajustando el proyecto constantemente, pivotamos mucho. Buscamos oportunidades y sinergias para crecer en todos los sentidos, hablamos todo mucho, cruzo las ideas y el talento sin etiquetas.
Go Madrid es un ecosistema de innovación para crear empresas con terceros o con dinero ajeno. Ponemos marca a las empresas que creamos con Go Madrid, y las vendemos cuando van bien para crear otras. Ahora estamos creando cuatro.
P: Usted empezó a trabajar en Londres, tras terminar los estudios, y le ha ido bien. ¿Porqué volvió a España?
R: En Londres todo va muy rápido, dan dinero rápido si la idea gusta, y cierran rápido si va mal, sin penalizar el cierre. Yo tengo esa mentalidad anglosajona, pero volví de Londres en octubre de 2017 porque me tiraba estar con la familia, y quería poner a Madrid en el mapa de la innovación, no se reconoce en el exterior. Aquí hay mucho talento por sueldos de 45.000 euros al año, que en Londres costaría más de 120.000 euros. He quitado expertos a grandes empresas, hay que apostar por la innovación porque somos la puerta de Latinoamérica.
P: ¿Qué hacen en tecnología blockchain?
R: Grupo Olivo es la matriz de todas las empresas, y de ella depende ToQ.io, que es nuestra plataforma blockchain para desplegar los proyectos que abordamos con esta tecnología, y que contratamos con Go Madrid. Empezamos a trabajar con la tecnología blockchain al venir a España en 2017 por deseo de una de nuestras desarrolladoras (les dejamos libertad) Nodalblock estaba dando sus primeros pasos en nuestras instalaciones, y empezamos a desarrollar nuestro código. Hemos desarrollado unos seis proyectos en blockchain que están en uso, y trabajamos en otros tantos.
P: ¿Para que tipo de empresas trabajan?
R: De todos los tamaños. Uno de los desarrollos en uso es la blockchain que desarrollamos para tokenizar ginebra para un concurso montado por destilería Santamanía, en colaboración con Alastria. Ha quedado para certificar la calidad de los productos de autor de la destilería.
Otro proyecto basado en la tecnología de ToQ.io es la plataforma blockchain de cumplimiento (compliance) de Acciona, entró en uso recientemente. Es para dar trazabilidad y reforzar el procedimiento interno de identificación y validación de consultores comerciales.
Estamos trabajando en un gran proyecto de Repsol, y afrontamos otros para varias empresas del IBEX 35, con las que hemos firmado confidencialidad. El resto son pequeños proyecto para start ups de nuestro sistema, casi todos son Smart Contract de pago y de reparto. Algunos están en producción, uno de ellos ha recibido la inversión de una corporación.
P: Estará ganando mucho dinero con tantos proyectos……
R: Todavía no. La inversión realizada durante 2017 y 2018 en desarrollar proyectos pilotos no se recupera de un día para otro. También trabajamos mucho con el sistema asociación con clientes. Nuestro objetivo es tener éxito con ellos, y llevarnos una parte del negocio generado. Hemos entrado en beneficio, como empresa, pero todavía no con la tecnología blockchain. Espero llegar a ello en este año, me están saliendo muchos proyectos de esta tecnología, que terminaré pronto porque tengo del 80 al 90% adelantado por el trabajo y la investigación realizada durante los años de atrás.
P: ¿Cuál es el siguiente paso?
R: Estoy pensando en blockchain y banca. Los bancos del futuro darán un salto similar al de las aseguradoras. Antes llegaban al cliente por las oficinas de las corredurías de seguros, y ahora por Internet. El mundo Fintech cambiará radicalmente los productos bancarios para adaptarlos al estilo de vida de cada cliente, que quiere experiencias de vida digital. La banca debe darlas. Hablamos con los bancos para que lo hagan con la tecnología de bloques pero, en general, tienen muchas reticencias con ella, les suena muy nueva.
Voy a los bancos con soluciones muy probadas y las compran, pero cuando digo que tiene blockchain les da miedo. Es por desconocimiento, hablamos con gente de negocio, y la tecnología blockchain todavía está en los departamentos de innovación.
P: ¿Cuánto le queda a esta tecnología para estallar?
R: Poco a poco, se irán adaptando nuevos casos de uso. Hay mercado, pero falta evolucionar. El 5G, sobre todo, será un acelerador muy fuerte porque cuando tienes un ancho de banda tan grande no puedes tener toda la información en un solo servidor, la latencia sería muy grande. Si hay 30 móviles concentrados, con un ancho de banda de 200 megas por segundo, demandarán mucha información, y hay que acercarla a donde están. La información del 5G estará distribuida, necesitará la capa de seguridad de blockchain, y además entrará IoT (Internet de las cosas).
A las empresas pequeñas les gusta la tecnología blockchain, tienen la mentalidad de compartir. Los grandes tienen miedo a invertir en el futuro, recordemos que los grandes no empujaron Internet. La primera banca digital española fue creada por Bankinter en España, era un pequeño banco. La mentalidad de las empresas terminará cambiando, es un problema mundial.
P: ¿Ustedes están en Alastria?
R: Sí, es una maravilla sentarnos con ellos para acelerar este cambio juntos. Estudiamos sinergias, cuanto más talento atraigamos será mejor. La idea de Alastria es espectacular, poner de acuerdo a muchas corporaciones en un solo proyecto ha sido una labor titánica. El proyecto crece al haber puesto una persona ejecutiva a tiempo completo al frente.